Comentario
En junio de 1830 murió Jorge IV y le sucedió su hermano, Guillermo IV, hasta entonces duque de Clarence, que no gozaba de más prestigio que su antecesor al iniciar el reinado. Era entonces un hombre de sesenta y cinco años, que sólo hacía tres que se había visto convertido en príncipe heredero y que, desde cuarenta años antes, había llevado una oscura vida de marino retirado, en compañía de una conocida actriz, Mrs. Jordan, con la que tuvo una caterva de hijos ilegítimos. En su matrimonio oficial con Adelaida de Sajonia-Meinigen, sin embargo, no tuvo hijos."Se distinguió -escribió Charles Greville, un escritor contemporáneo- por hacer discursos absurdos, por una actividad pública enfermiza, y por un general desenfreno que parecía el presagio de una locura incipiente". Su comportamiento, sin embargo, estuvo por encima de las expectativas iniciales. En la crisis política desencadenada con ocasión de la reforma electoral de 1832 se manifestó respetuoso con las prácticas constitucionales, aunque no compartiera los criterios de lord Grey.